El Domingo 29 de enero tuvo lugar nuestra celebración anual de “La Fiesta de la Unión”, un día de encuentro en el que todos los Antiguos Alumnos nos sentimos invitados a participar.
Como plato importante del día, se celebró el Homenaje a los Antiguos Alumnos. Este año se homenajeó a D. Francisco Tabueña Bardají, y a D. José Luis Ibor Artero.
El Acto tuvo lugar en la sala de medios del colegio tras la misa del Antiguo Alumno, que se realizó a las 12 horas y fue celebrada por D. Pepe Domingo (director de la casa y párroco de María Auxiliadora), D. Javier Alzueta (anterior consiliario de los AAAA de Huesca) y José Antonio Iguacel (Vicario).
Conozcamos a los Homenajeados.
Francisco Tabueña Bardají (Paco para los amigos) nació el 13 de enero de 1949. No cursó todos sus estudios en los Salesianos, sólo realizó el último. Un intenso año, el 62-63, que le sirvió para dejar huella en su vida y ya nunca más separarse de la Casa Salesiana. Una relación, que, como en tantas ocasiones, arrastró a su familia. Francisco y Roberto, sus hijos, también son antiguos alumnos.
Paco formó parte de La Pasión en su juventud, miembro de la junta de la Asociación de Padres durante la etapa escolar de sus hijos, recuerda con cariño los primeros pasos que se dieron con la adquisición de Gabardip, en Villanúa.
No olvida la amistad que le unió en el colegio a Enrique Ramírez y José Clemente Mur; los avances en el fútbol con el DO-SA o el cine en aquel viejo teatro.
En la actualidad acude con su esposa a las celebraciones del colegio, la pandemia les privó de celebrar como se merece San Juan Bosco y María Auxiliadora. Unas fechas marcadas en rojo en el calendario de «Los Tabueña» y que ahora espera recuperar.
José Luis Ibor Artero, entró en el oratorio salesiano a finales de los años cincuenta, dirigido por Santamaria (coadjutor salesiano), y párroco, Don José Castell.
Mi hermano ya estaba escolarizado cuando yo ingresé. Mi primer maestro en primaria fue Don Juan Ferran, (coadjutor salesiano). Más tarde en preparatoria e ingreso llegó Don Javier Alzueta, que a todos os sonará, que todavía no era cura. Como directores tuve hasta cuarto de bachiller a Don Román Beltrán y Don Jaime Laguia, como profesores en todo este tiempo, Don Ramón, Don Ricardo Recalde, Don Eugenio, Don Tomás, Don Rafael y muchos más. También coincidí con Don Pedro Calvo, el cual fundó un equipo de futbol “el Ultreya”, con el que quedamos clasificados para los juegos escolares nacionales.
En el año 1.967, salí del colegio a trabajar en la banca, posteriormente me casé y tuvimos dos hijos, que no dudamos en llevarlos a los salesianos. Esto implicó mi vuelta como AA.AA. En ese tiempo había vuelto a Huesca Don Javier Azueta y era el consiliario de los AA.AA. Por otro lado, estaba en la asociación mi querido amigo Carlos Luna (D.E.P.) y entre los dos me propusieron llevar la tesorería de los AAAA., cargo que acepté. Estuve bastantes años, en los cuales colaboré en el monumento a Don Bosco, en la pajarita de oro, en el centenario, en la pasión, en bato y borrego, en el belén, Javierada, fiestas de Don Bosco y María Auxiliadora y otras actividades que eran muchas. Han sido años gloriosos en este colegio desde el oratorio de Santamaria hasta ahora.
Gracias a todos los que me ayudaron en esta vida y la fe a María Auxiliadora y Don Bosco que me guiaron y me siguen guiando. “gracias”.
Tras el homenaje y la tradicional foto, nos fuimos todos a seguir celebrando la Fiesta de La Unión con una comida.
Por último, pudimos disfrutar del concierto de Don Bosco que cada año nos regala la Orquesta de Cámara de Huesca, este año acompañados sus compañeros de “la caja de música.”
