El “Grupo de las 10”, recuerda a D. Javier Alzueta

21 mayo 2024

“En verdad, en verdad os digo que lloraréis y os

lamentaréis, pero el mundo se alegrará; estaréis

tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en

alegría” (Jn 16, 20).

Como un corazón alentado por las técnicas modernas, el “WhatsApp” nos comunicaba sus latidos, y se convertía en transmisor de noticias de todo lo salesiano y aliento por nuestra parte y su “ánimo” desde el fondo de su siempre entusiasmo, coronado por la resignación, “porque a donde yo voy, sabéis el camino” y “porque mi yugo es suave y mi carga ligera”.   Y porque bien sabía D. Javier “que los padecimientos del tiempo presente no tienen comparación con la gloria que ha de manifestarse en nosotros”

El “WhatsApp” era el hilo de comunicación, sucesivos suspiros llenos de esperanza que administrábamos con los mejores deseos. Se “cortó” el hilo pero no, nunca la esperanza que nos conduce a “verdes praderas y nos lleva por caminos rectos, porque tú Señor estás conmigo; tu vara y tu bastón me inspiran confianza”.

Falleció D. Javier, un Viernes de Dolor, el 22 de marzo de este año del 2024. Nos sobrecogió. La angustia humana nos inundó, y los recuerdos, entrañables, que nos unía a tantos y tantos que le  queríamos y a quienes nos quería a lo largo y múltiples actividades que compartimos.

Me referiré a las tres, son algunas más, que más directamente y laboriosas fueron. La más antigua como Consiliario de la Asociación de Antiguos Alumnos, la Asociación la nuestra de súper solera Asociación que nos lleva al año 1914, unos años antes con seguridad cuando se constituyó, ya que la “Crónica de la Casa” nos da la fecha del 5 de mayo de ese año 1914,  cuando  se celebró la primera “Fiesta de la Unión”.

D. Javier estuvo de Consiliario en la Asociación de Huesca desde el año 1990 al 2019, lo que suman un total de 29 años. Como reconocimiento a su labor como Consiliario se le concedió el DISTINTIVO DE ORO A NUESTRO CONSILIARIO D. JAVIER ALZUETA (2008).

El Consejo Nacional de Antiguos Alumnos Salesianos, a instancia del Consejo Regional y a propuesta de nuestra Asociación de Huesca, concedió el Distintivo de Oro a nuestro Consiliario D. Javier Alzueta Domeño.

La figura del Consiliario, siempre ha encabezado las Juntas creadas en Entidades, Empresas o Asociaciones tanto culturales como deportivas y por supuesto religiosas. En nuestras Asociaciones, el Consiliario tiene su importancia al unirse el sentimiento espiritual con los antiguos alumnos, espiritualidad que nos hace rememorar los años de la estancia en el Colegio. Con su presencia, D. Javier con sus “Buenas Noches” en reuniones o Asambleas, con sus “palabritas” en cada momento, sabía transmitir el espíritu en todos nosotros.

D. Javier Alzueta, rodeado de antiguos alumnos en la cena homenaje el día 5 de abril de 2008, con motivo de la concesión del Distintivo de Oro.

D. Javier fue el nexo de nuestro pasado y nuestro presente salesiano. Su palabra que nos dirigía a través de nuestra Revista “Huesca y Don Bosco” con él encabezaba el tradicional “Queridos Antiguos Alumnos”, era el consejero y maestro que nos seguía enseñando, era el confesor que atendía y nos ayudaba en nuestro caminar.

Fue en todo momento el amigo que compartía y nos acompañaba  en nuestras alegrías y nuestros momentos tristes. Nos recordaba a aquellos salesianos de nuestros años de colegio, los que iniciaron nuestra formación y espíritu salesiano. Era a quien seguíamos agradeciendo más directamente, la educación recibida.

De Don Javier, en la Asociación como Consiliario con su labor y cualidades reseñadas, no puedo olvidar de teclear en el ordenador, el interés que siempre tuvo por la comunicación –una de las prioridades de Don Bosco-, que lo puso de manifiesto siempre en la revista “Huesca y Don Bosco” con su acertado “Queridos Antiguos Alumnos” . Era como abriendo el camino para dar paso al noticiario y serie de artículos, que formaban el contenido. Su larga trayectoria en el tiempo, más de 50 años, ha tenido sus altibajos. Después de unos comienzos alentadores editado en imprenta, la economía asociativa, los diversos cambios de editores e incluso la falta de colaboradores aportando material y los diversos formatos que cada tiempo exigía: escrito en varios folios, multicopista, Imprenta Gráficas Vicente Alós, Ordenador, vuelta a la imprenta y el paso técnico a internet del que hoy disfrutamos, nunca faltó el consejo de nuestro Consiliario con su escrito, que encabezaba con “Queridos Antiguos Alumnos”.

Ha dejado su carisma en especial en el equipo que hoy realizan la revista, llenos de unidad, de laboriosidad, entusiasmo y proyectos que la engrandecen y renuevan en cada publicación.

Una segunda actividad con D. Javier, es la que dio fruto a un Documento amplio, de 634 páginas y más de 200 fotografías en blanco y negro y color reseñando los años 1906 al 2014 ampliado con una Adenda desde 2015 a 2018 y un amplio y detallado índice para mejor localizar fechas y acontecimientos,  que entregue y dispone la Comunidad de Huesca.

En varias ocasiones tuve la necesidad informativa de consultar la “Crónica de la Casa Salesiana” que está escrita desde la llegada de la primera Comunidad a Huesca.

La ayuda me vino de D. Javier que me dio oportunidad de disponer de ella en varias ocasiones. Así nació la ilusión de escribir una Historia del Teatro Salesiano en Huesca y de las celebraciones o acontecimientos más destacados.

D. Javier dedicó su tiempo y ayuda a mi trabajo del que hago constar en el libro y reitero nuevamente mi profundo agradecimiento desde mí más sentido en estos momentos de mi corazón.

Y me referiré a la tercera actividad, esta religiosa, que le dimos el nombre de “El Grupo de las 10”.  El 10 era la hora de la mañana en que D. Javier celebraba todos los domingos su habitual misa en el Santuario de María Auxiliadora.

Hora y lugar donde “casualmente” nos íbamos reuniendo un grupo de Antiguos Alumnos, más bien “veteranos”, que al finalizar la Santa Misa, nos reuníamos en el Bar del Colegio, que puntual estaba Jorge dispuesto a dar su nota de calor y amistad con unos cafetitos que cubrían un agradable tiempo. En medio, entre el Grupo de Antiguos Alumnos “veteranos”, D. Javier traía su sonrisa, extendida y convertida en alegría, que nos confortaba con sus sabias palabras. Sus actividades, que le esperaban, nos hacía siempre el encuentro corto, pero aprovechado y entrañable. Y se fueron añadiendo las respectivas señoras y el Grupo tenía más sentido, si cabe, de familia.

Pero ¡Ay! Un lamento de tristeza nos embargó el corazón. D. Javier era trasladado a Zaragoza, a una Residencia Hijas de María Auxiliadora. Van a cumplirse 3 años desde la última celebración y encuentro de D. Javier Alzueta con el “Grupo de las10”, el 21 de julio de 2019, que queda en el recuerdo que nos trae la fotografía que acompañamos.

“Grupo de las 10” mañana del día 21 de julio del año 2019

D. Javier en las tardes noches, en Zaragoza, donde se aplaudía, como en toda nuestra querida España agradeciendo a los componentes de la Sanidad Pública, aportaba su nota de alegría saliendo a la terraza de la Residencia y dedicaba al vecindario con su inseparable y querido saxofón, parte de la Sinfonía nº 9 de Beethoven de “El Himno a la Alegría”

D. Javier interpretando “El Himno a la Alegría

D. Javier Alzueta Domeño, ya está “en la Casa del Padre, donde voy a prepararos un lugar para donde yo esté, estéis también vosotros”, y donde podremos encontrarnos si glorificamos con nuestra vida al Señor. Que así sea.

 

Manuel Carranza

También te puede interesar…

Bato y Borrego 24

Bato y Borrego 24

«A mí las infernales legiones». Así es como arranca la representación de Bato y Borrego, una obra con muchos años de historia y que es un sinónimo de navidad en la capital oscense.

De corcho a piedra

De corcho a piedra

A través de la realización de un portal, los maestros fueron enseñando distintas técnicas que los alumnos iban poniendo en práctica para la construcción del pesebre. Aunque todos partieron del mismo material

Medio pan y un libro

Medio pan y un libro

De toda la historia de las tradiciones, una de las más arraigadas es la de la Navidad; de ahí lo de reconstruir el llamado belén y ponerlo hacia la fecha de la fiesta de La Inmaculada hasta el mes siguiente coincidiendo con La Epifanía