Hemos empezado un nuevo año y me vienen a la mente un cúmulo de emociones, preocupaciones y peticiones habidas y suplicadas en esta historia presente de nuestra vida. Las enseñanzas que ha traído este tiempo de enfermedad mundial, el realizar propuestas para un futuro lleno de grandes incertidumbres. En medio de esta situación tan complicada de limitaciones de aforo, de distancias de unos con otros, casi atrapados por una sensación de miedo me pregunto, ¿tuvo Don Bosco alguna vez miedo? Era humano y lo tuvo en alguna noche víctima de enemigos, pero ahí estaba su perro “Gris” y su mayor fe y defensa como contraste al miedo: la Madre Auxiliadora. Pues María nos mira con ternura, así como mira a su Hijo Jesús, que sostiene en sus brazos. Esa mirada que invita a que, en este tiempo presente, tan atípico, nos sirva de crecimiento humano y espiritual. Sea tiempo de sentirnos más hermanos, sin obstáculos pese las distancias normativas, ni que las mascarillas sean impedimento para abrir nuestros labios, dirigirnos a la Virgen Auxiliadora desde nuestro corazón todos los días y muy en especial ese día tan nuestro de cada mes. El 24 nos vemos.
La Pasión
Los días 5, 6, 12, 13, 19 y 20 de abril vuelve al Teatro Salesiano de Huesca uno de los actos más tradicionales de la Semana Santa oscense: La Pasión. Cerca de 80 años de historia avalan a esta obra de teatro que recoge la vida, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret.